El llamado 'Retro Internet'

Por: La Pingüina Vengadora y También Vengativa

Cuando yo tenía seis años escuchaba mucho sobre la existencia del internet pero sólo tenía seis años y me preocupaba más tener mis muñecas y peluches en órden, mi patineta y mi bici con rueditas eran mi adoración y en la escuela jugábamos con la cuerda y las computadoras eran cosas de gente grande. Mi papá hacía sus planos y los imprimía en una cosota de su oficina llamada "Plotter" y mi mamá tenía una en su consultorio, mis hermanos mayores usaban la única que había en casa para sus tareas y así mi vida, transcurría en Santa Paz hasta que a los diez años comencé a meterme a curiosear porque ya había internet al que para estar conectada había que darle "click" a un icono que decía "Internet Telmex" y hacía un ruido medio mafufo y si alguien tenía la osadía de descolgar el teléfono ya valías porque te desconectaba del internet y pues era tal mi ocupación en eso como entrar a Cartoon Network o Disney o algo así que cuando me botaban -por lo regular mis hermanos- comenzaba a distraerme con algunos juegos que mis papás habían descargado o instalado de alguna cortesía de software -ya saben eso, venían de regalo con alguna impresora o algo-, o sea en CD, para que los usáramos mi hermano menor y yo y así, pues mi horizonte internet no era tan ambicioso como se puede creer. Descubrí Hotmail, Yahoo y MySpace a los doce años mas o menos y luego Hi5 y Facebook hasta como a los diesciseis. La verdad siempre fui más metida a investigar sobre animales que a socializar, especialmente por lo que se decía de Internet: "Es como salir a la calle, no a todas partes puedes entrar". Pero platicando con gente más grande que yo, que en los noventas ya usaban internet, me sorprende enterarme que se expresan con mucha nostalgia de "Aquellos tiempos", que había, dicen, páginas numerosas sobre muchísimos temas y que en ese entonces rifaban servicios como "Geocities", "AOL" y otro tipo de redes sociales, que había otros messengers como el Windows Live (ese sí me tocó) y el Yahoo Messenger y que podías hacer una página personal con musiquita y fotos que se movían (gifs) y que no había tantas restricciones como ahora. De algunas cosas sí me acuerdo pero tengo más presentes los juegos, los juegos siempre me han gustado más y fui fanática de juegos arcade y algunas emulaciones de Mario Bros. y antes era un poco más fácil conseguir juegos en internet. Ahora son  aburridos y hasta violentos para mi gusto.

Y entonces veo mi tablet y me pongo a navegar su contenido que, aunque no sirve el micrófono (la dejé caer una vez), está padre porque tengo juegos y aplicaciones que me gusta usar, tengo libros en pdf y muchas canciones de mi música favorita y pienso que cuando yo comencé a usar la computadora, que era un armastote que casi ocupaba un escritorio, había que esperar a conectarse para usar el internet y para tener música necesitabas bajar un programa llamado Winamp para "Rippear" un disco compacto pero si se te ocurría usar "Audiogalaxy" o "Napster" tenías los mp3 ya rippeados pero tenías que esperar como dos días casi para bajar algunas canciones. O sea, una tableta que dificilmente ocupa la cuarta parte de espacio de un CPU pequeño de ese entonces, puede hacer todavía un poco más que esas computadoras pero resulta que el Inernet de entonces era, para muchos, más bonito que el de ahora. Sin embargo creo que es cuestión de adapatarse.

Hoy es padre navegar en internet cuando se sabe lo que una anda buscando y no es precisamente a presumir fotos en facebook o a ver quién te dejó en "visto" en WhatsApp. Tampoco es muy ilustrativo ver noticias sobre notas sensacionalistas como los romances de las estrellas, los vestidos que las famosas presumieron, los chismes de "Hoy", "Venga la alegría" o "Ventaneando". Las muchas notas sobre lo maquiavélicamente populista que es el Peje, según ellos, o si ya privatizaron el bosque de Chapultepec mientras jugaban Corea contra Alemania o cosas así. Lo padre del internet son las maneras en que puede uno obtener información VERDADERA cuando se sabe buscar, los videos de tus artistas favoritos, platicar con tu familia que vive lejos, mandarle un beso a tu Crush mientras trabaja y hasta hacer negocios cuando se hace de manera adecuada. Dice mi papá que en sus tiempos de niño tenía que entrar a una oficina de telégrafos para pagar un peso por palabra por un mensaje cortísimo que tardaba un rato en llegar a la casa del destinatario y ahora puedes hacer lo mismo usando WhatsApp o incluso el SMS del celular en segundos, que al final sigue siendo un modo de internet y cuyo costo no es ni siquiera de un peso mexicano. igual dice mi padre que cuando era niño compraba una revista llamada "Pen Pal" en donde había direcciones postales de chicos por todo el mundo y que escribía sus cartas, las metía en sobres, compraba timbres (piezas pequeñas de papel signadas por el servicio oficial de correo y engominadas para fijarse al sobre) y las enviaba a otros países pagando cierta suma módica precisamente con los timbres, que estas cartas tardaban al menos cuatro días en llegar al destino, luego el tiempo en que tardaba la persona en responder y venga esperar otros días para recibir una carta que cuando menos tenía cuatro párrafos y eso resultaba una práctica casi artesanal y hoy puedes escribir un correo electrónico gratuito al que por lo regular te responden con dos o tres monosílabos. Yo digo que lo único malo de eso es que dejó de existir el oficio de "Cartero" pero incluso ellos evolucionaron al servicio de paquetería y no vas a enviar un aparato o un documento oficial por correo elecrtónico, ¿o sí?.

Será que soy odiosamente positiva pero, entre todo lo malo que pueda haber, estos tiempos de internet "perverso" tienen su lado padre y progresista y mi  papá está de acuerdo conmigo, él a su edad disfruta tanto como yo usar el internet y a veces los dos chateamos para compartirnos páginas que nos interesan estando incluso dentro de la misma casa. Al final del día platicamos ya en la merienda y nos reímos o resolvemos el mundo con un café. Mi mamá es un poco más seria pero también tiene sus ratos de navegar y también nos platica las cosas que encontró o que sus amistades le mandan por WhatsApp, cosas que dice mi abuelita antes eran asunto de ficción (por cierto, ella también es usuaria del internet y tampoco reniega).

Yo digo, a lo mejor es cuestión del estado de ánimo. No sé, igual.

Luisa Itzel

Revisión y corrección: Max Liverant